Lo nuestro fue imposible, yo una dama de palacio y tú guerrero de pueblecito, pero aún así creí que podía funcionar... no se porque dejaste de contestar mis cartas, pero ya hace más de 10 años que las cartas no son enviadas a ti, son guardadas en un cofre y una llave que esconde nuestro amor, aquel amor que tanto escondimos durante años.
¡Mi querido amor, mi amante! Esta carta será la última que guarde en aquel cofre, pero...
-¡Seńorita Rosanna! No quería decírtelo antes, porque estaba su esposo, pero esta mañana llegó una carta del guerrero Ericsson.
Pero no será la última carta enviada a ti.
Debes iniciar sesión para publicar un comentario.