Querida ansiedad para serte sincera ya me siento cómoda escribiéndote, porque hace mucho que te fuiste de mi vida. Todavía recuerdo la primera vez que me visitaste, era tan pequeña y frágil, y tenía miedo a nunca ver más aquella estrella que llamaba abuela y se me fue al cielo.
Después me volviste a visitar frecuentemente, el miedo a estar sola, a no tener todo bajo control y a que todo me salga mal... ! se hicieron parte de mi ¡
Día a día me acompañabas.
Por el día caminabas conmigo, aquella calle que pasaba todos los días con la mirada en el piso, porque sentía que no encajaba en ningún lado. Por las noches me viste llorar, y hundirme en mis problemas.
Pero un día llegó él con sus ganas de amarme y todo cambio. Poco a poco fuiste desapareciendo, me sentía feliz. A pesar que él estaba a miles de kilómetros de mí, nos queríamos y mucho.
Dicen que la felicidad no dura para siempre y fue lo que comprendí, cuando estar lejos nos afectaba. Por otro lado, me fui alejando de mi DIOS, porque sentía que no me escuchaba.
Ay mi querido amor, lo que nunca supiste fue que me estaba hundiendo otra vez.
-Amor, ¿qué nos pasa? - me pregunto mi amor un día. Continuara...
Debes iniciar sesión para publicar un comentario.